sábado, marzo 20, 2010

manuela: entre muros tu piel


detrás de este muro reconstruyes la vaga imagen de su cuerpo
afuera la noche es materia abstracta

                                             luna enlutada y pendeja (Castillo)
                                             ignorada

entonces de súbito la llama inmóvil de su pecho 
por fin convoca a tu sangre

                                            eclosión celular

deja que la abras                exploración de un valle abandonado
se deja ocupar            
                                            oquedad que no opone resistencia

ah su culo: el cuartel efímero de un anhelo ilusorio
ah su ausencia: la muerte por inanición

la libertad de tus manos es tal que tus dedos se confunden con el tiempo

después de saberla le cierras los ojos

                                psique: alojamiento de torrentes residuales
                                seminalis
                                vaginalis

ahora las bocas secas y ateridas
ahora los huertos ácidos

te deleitas con su fruto incandescente
te das unos topes contra el manjar que su piel esconde
clítoris gigante que más tarde languidece y
en la soledad se asfixia

                                             vuelta al refugio

así de pronto la realidad asesta el golpe
así de fácil el instinto perece permitiendo
que este cuarto apestoso
tras un murmullo acuoso se vuelva a obnubilar
 

4 comentarios:

Nanu dijo...

ese instante de orgasmos en el que el mundo se para, no tiene problemas, no hay pobreza ni riqueza....solo el egocentrismo (maravilloso esta vez) de estar disfrutando sin control.

Mastodonte dijo...

larga vida, igualmente, al orgasmo solitario

Rita Jardcor dijo...

Efraín que poema!!! carajo tan bueno y tan largo, como prefiero la poesía erótica, porque a veces muy corto me hace coito interruptus. Es un honor saber que visitó mi bló. Pero insisto, este poema suyo, esta bien bueno.

Mastodonte dijo...

Gracias, Rita! Acá andamos en el intercambio bloguero. Que siga!